jueves, 15 de septiembre de 2011

No hay nada que festejar.


Hace un año, se anunciaba con bombo y platillo la celebración del bicentenario de la Independencia de México. Se gasto una verdadera fortuna, para hacer una gran celebración.
En cambio este año, el aniversario de la independencia, es desangelado, gris, sobre todo, porque muchos mexicanos nos preguntamos si existe algo para celebrar.
Nuestro país poco o nada a cambiado en estos 201 años, los indígenas siguen siendo relegados, despreciados, vejados, etc. La riqueza del país sigue en manos de unos cuantos, los pobres cada día son más, la Iglesia ha recuperado el poder perdido en estos últimos años, cortesía de los gobiernos mochos del PAN, así que ¿En verdad tenemos algo que festejar? Digo, aparte, nos independizamos de España, para terminar siendo el patio trasero de USA, dejamos de ser mano de obra barata para los gachupines, pero terminamos siéndolo de los gringos.
A esto hay que sumarle, la debacle de la sociedad mexicana, el increíble grado de violencia que crece día a día, dañando a las futuras generaciones de mexicanos, que cada vez se acostumbran mas a la violencia. La campaña de sabotear el grito, no creo que ayude mucho, a fin de cuentas, nuestras esperanzas de cambio no pueden estar en los políticos, que cambian como veletas de acuerdo al viento que mejor les convenga, la esperanza debe estar puesta en el cambio de cada uno de nosotros, y en la unión de la sociedad civil, para poner un alto a esta masacre que se comete en nuestro país.
Pero mientras eso sucede, creo que en lugar ¡Viva México! Deberíamos pedir ¡Sobrevive México!

domingo, 11 de septiembre de 2011

11 de Septiembre


La fecha del 11 de septiembre del 2001, quedo grabada para miles de personas alrededor del mundo, pues para muchos fue el día que Estados unidos pago por sus pecados y soberbia, para otros fue el día que los alcanzo la realidad, para muchos más, fue el día en que miles de inocentes murieron masacrados en uno de los más crueles atentados de la historia.
Pero este hecho histórico, no es el único que se “conmemora” en esta fecha, pues otro 11 de septiembre, pero de 1973, el gobierno Chileno encabezado por el Presidente Salvador Allende, era víctima de un golpe de estado, organizado por los altos mandos del ejército, encabezado visiblemente por Augusto Pinochet y apoyado tras bambalinas, por el gobierno de USA, ante el temor de que Chile se convirtiera en una nueva Cuba.
Dos hechos quizás diametralmente opuestos, pero con algo en común, dos lamentables genocidios, donde murieron inocentes, uno duro un solo día, el otro se extendió por años, pero a fin de cuentas, los muertos de ambos hechos, solo fueron víctimas inocentes, que no merecían tan triste final. Y a pesar de la culpabilidad de USA en el 11 de Septiembre Chileno, esto no justifica la masacre de civiles inocentes en New York, ojala este 11 de septiembre sirva para reflexionar, sobre lo cruel que puede llegar a ser la estupidez humana.
Descansen en Paz las víctimas inocentes de estos dos 11 de Septiembre.
Pd. En mi particular 11 de septiembre, mañana llega a mi ciudad la caravana por la Paz encabezada por Javier Sicilia, para mí este día quedara marcado, como el día en que mi ciudad se unió al grito nacional de ¡No más sangre! Porque efectivamente, estamos hasta la madre.